miércoles, 21 de junio de 2000

Huellas de selva

Para Martha Figueroa,
Y al grato recuerdo de José Ricardo.
Al no ser nada ni nadie
estaré presente en mis hijos… y en ti
Tus pensamientos serán mi voz
Y mi razón de ser tu cuerpo

En el que experimente la humedad de selva inexplorada
y el murmullo silencioso del fermento
Que engendra la pasión y el frenesí

Juntos arribamos al abismo del placer
y al juego de escapar. ..
De gemir
De adorar
De morir…
Y de volver a jugar

De pronto…
El vendaval a ritmo de zamba
Llegaron las ausencias y se fueron las querencias
Mi espíritu creció en soledades acompañadas que me consumían
y me consagré como autómata a seguir tus femeninas huellas

Y el vacío del tiempo atrajo el atardecer y enmudecí
Ya no quería volver quería moverme
y en un desvariado sueño del que ya no despertaría
sentí tu mano

Tu mano que acarició mi mortal dolor
Y como un ciego a tu mano…
me… acogí…

Juandiegouribe
21 de Junio del 2000

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